Hace unos días, unos amigos bromeaban conmigo sobre cómo me gano la vida, decían “tienes un trabajo fácil, solo ves la pintura secar”. Explicar la importancia del inspector de recubrimientos no es tarea fácil. Mucha gente cree que la pintura es la etapa más fácil de un proyecto de construcción o mantenimiento industrial. Nada más lejos de la realidad.
La aplicación de recubrimientos protectores es básicamente la instalación de un método de control de corrosión. El tiempo de vida de un activo depende, entre otras cosas, de un eficaz desempeño de los métodos de control de corrosión. Para lograr eso, cientos de profesionales especializados trabajan arduamente en diferentes áreas, y uno de ellos es el inspector de recubrimientos.
El trabajo del inspector
Definido de una forma muy sencilla, un inspector de recubrimientos es un técnico de control de calidad especializado en recubrimientos. El trabajo del inspector es, sin embargo, bastante amplio. Cuando una superficie necesita ser protegida contra la corrosión, un inspector de recubrimientos es requerido para hacer las evaluaciones y elaborar una especificación de pintura o un plan de pintura de mantenimiento. En ocasiones, un recubrimiento puede fallar despues de ser aplicado, y el inspector puede actuar como un técnico forense, investigando la causa de la falla y emitiendo conclusiones y recomendaciones.
Los inspectores de recubrimientos también realizan pruebas y mediciones sobre los productos aplicados, pruebas de aplicación de pinturas y pueden evaluar el desempeño de los sistemas de recubrimientos. Un inspector podría también requerirse para medir espesores de película, evaluar la adherencia de un recubrimiento, detectar discontinuidades y poros en la película o verificar el desempeño de un producto aplicado en paneles de prueba.
Entrenamiento y certificación
Para realizar todas estas funciones, el inspector debe entrenarse, ganar experiencia y también certificarse según el nivel de conocimiento y pericia alcanzado. Existen varias organizaciones que certifican el entrenamiento y experiencia de los inspectores de recubrimientos. NACE International y SSPC – The Society for Protective Coatings, son algunas de las organizaciones más conocidas que cuentan con programas de entrenamiento y certificación. Estas organizaciones recientemente se fusionaron para formar la Asociación para la Protección y el Desempeño de los Materiales (AMPP por sus siglas en inglés).
El entrenamiento en recubrimientos protectores e inspección no solo beneficia al inspector de control de calidad, también es útil para el personal de preparación superficial, pintores, capataces, ingenieros, departamentos de compra y procura, gerencia técnica entre otros. El personal involucrado en un proyecto de pintura debe recibir al menos el entrenamiento básico, para garantizar que conozcan los procedimientos recomendados, los niveles de calidad requeridos y los requerimientos técnicos de pinturas, materiales y equipos.
El rol como inspector de calidad
Cuando un inspector actúa como técnico de control de calidad, su trabajo es verificar que se cumplen los requerimientos de calidad, es decir, que se sigue la especificación de pinturas. La especificación es el documento maestro que indica cómo realizar la instalación del recubrimiento y como controlar y asegurar la calidad del trabajo. Todo proyecto de aplicación de recubrimientos protectores debe contar con una especificación de pinturas y es responsabilidad del inspector familiarizarse con la misma.
Durante su trabajo, el inspector debe observar, documentar y reportar sus evaluaciones, mediciones y pruebas, e indicar el cumplimiento o no de la especificación. No es tarea del inspector dar recomendaciones al contratista sobre como hacer el trabajo, y usualmente no tiene autoridad para detener el proyecto. El inspector debe realizar observaciones al contratista si algún aspecto de la especificación no se está cumpliendo, a fin de que pueda aplicar correctivos. No obstante, el contratista es el responsable de ejecutar el trabajo según lo especificado y lograr los niveles de calidad exigidos. El inspector está allí para verificar que se cumplen esos niveles de calidad y para documentar el proceso.
¿Y dónde está el inspector?
Cuando no hay inspección de calidad, el contratista trabaja sin supervisión, y cuando no hay supervisión cualquier cosa puede pasar. Hace algun tiempo atendí la evaluación de una falla en un proyecto de recubrimiento externo de tuberías para un acueducto. El sistema de recubrimientos consistía en 3 capas de pintura alquídica (fondo/intermedio/acabado) a un espesor de pelicula seca (EPS) aproximado 1,5 milésimas de pulgada (mil) cada una. El contratista debía limpiar las tuberías con chorro abrasivo a metal blanco y lograr un perfil de anclaje entre 0,75 y 1,0 mil.
Al poco tiempo de iniciar el proyecto, el contratista se quejó de puntos de corrosion sobre la capa de imprimación (fondo). No había en sitio un inspector de recubrimientos, por lo que no existían reportes ni documentos de inspección. Durante la evaluación se realizó una prueba de preparación superficial, chorreando con abrasivo una sección de tubería. El perfil de anclaje de la superficie fue de 4 mil, superior al valor especificado. Resultó obvio que con un perfil tan alto, el fondo alquídico no cubría los picos del perfil, ocasionando los puntos de corrosión.

Un inspector de recubrimientos habría notificado al capataz que el perfil de anclaje era muy alto o habría constatado que el abrasivo tenía una granulometría elevada incluso antes de chorrear.
Pintando estructuras en taller
Cuando un cliente encarga la fabricación de estructuras de acero a un taller, también debe asignar inspectores en sitio. Estos inspectores serán los encargados de chequear la calidad del trabajo en diferentes puntos de control o hold points. Cuando no hay inspectores en el sitio de fabricación, muchas veces el cliente se encuentra sorpresas desagradables cuando las piezas llegan al sitio del proyecto.
Así ocurrió en un proyecto minero donde el propietario había recibido varias estructuras de acero de un fabricante extranjero. Las estructuras tenían poco tiempo almacenados a la intemperie y en varias se observaban peladuras, deslaminación del recubrimiento y ampollamiento por corrosión.



En este caso, los análisis determinaron que las superficies de varios equipos y estructuras no se limpiaron con chorro abrasivo, lo que ocasionó corrosion prematura y ampollamiento en el recubrimiento. Además, en muchos casos se excedieron los tiempos de repintado, generando problemas de deslaminación y peladuras.
Resumen
Las fallas mencionadas en los dos proyectos anteriores ocasionaron retrasos y perdidas económicas considerables, que se hubiesen podido evitar simplemente teniendo un inspector en sitio. Los inspectores de recubrimientos trabajan para alcanzar los niveles de calidad requeridos, dando certeza al propietario de que su activo tiene una protección anticorrosiva adecuada.
Por mi parte sigo teniendo problemas para explicarle a mis amigos a que me dedico, creo que les voy a seguir la corriente. Les voy a decir: “Si, realmente tengo un trabajo fácil… solo veo la pintura secar!”.